Durante el año los pies son los grandes olvidados del cuerpo, sin tener en cuenta que son ellos los que soportan todo nuestro peso; pero con el verano nos entran las prisas y nos urge lucirlos bonitos.
En realidad no existe mucha diferencia en los pasos a seguir entre hacer una pedicura o una manicura. Ya que la principal diferencia que encontramos son las odiosas y en ocasiones molestas durezas. Es por eso que una vez ablandados los pies en un pediluvio, limada y cortadas las uñas y la cutícula tratada, procedemos a eliminarlas, en el mercado encontramos numerosos productos exfoliantes y emolientes. Tras aplicarlo por todo el pie se masajea bien, y facilitamos y aceleramos su efecto con un pequeño truco, que consiste en envolver toda la zona con papel osmótico o film. Tras dejarlo actuar un rato sumergimos nuevamente el pie en el pediluvio y lo secamos para después poder usar la lima especial (ver foto). Otra opción, siempre que el producto usado sea exfoliante, es utilizar la lima con este aun sobre la piel y luego aclarar.
La lima no tiene por que ser igual que esta, pero otras me dan demasiada grima y son mas agresivas, como en concreto una que me recuerda al típico rallador de cocina.
Por ultimo aplicamos sobre la uña la base protectora y maquillamos como deseemos. Podemos combinar la pedicura con la manicura. No olvidéis de aplicar crema hidratante con un ligero masaje.
.Espero que os sirva de ayuda.
-Un consejo muy importante, jamás se debe realizar una pedicura sobre los pies de un diabetico, mi profesión lo prohíbe, ya que en el caso de provocar algún corte este tardara mucho en curar y una herida pequeña podría convertirse en un autentico y serio problema, del cual la profesional seria responsable.